Extraigo textualmente del blog de Jorge en el diario ABC:
“volver a entrar en el reino de la respetabilidad a no ser que quieran convertirse en los PARIAS del mundo económico.
Para evitarlo, el camino exige, como poco, PARTICIPAR activamente de forma pro-activa en el debate público sobre cómo se han hecho las cosas durante estos últimos años y cómo deberían hacerse en el futuro, sin recurrir a la tentación de enterrar la cabeza debajo de la arena; ACEPTAR una regulación inevitable, como está sucediendo en los últimos años, que ponga coto a la excesiva liberalización del sector en los EE.UU. durante los años 80; REVISAR productos, servicios, modelos de negocio y prácticas profesionales; INTEGRAR las lecciones aprendidas en estos años e incorporarlas a las estructuras, procesos y procedimientos de las organizaciones financieras y no caer en el autismo social; ATRAER liderazgo de comportamiento irreprochable, como hemos visto que han hecho algunos bancos, de forma ejemplar; y SOLUCIONAR las quejas legítimas de reguladores, consumidores, clientes y sociedad con respeto y asumiendo responsabilidades individuales y colectivas que estén a la par con los hechos cuestionados.”
En esta mágica y segura receta, su segundo ingrediente, aceptar la regulación, yo lo quiero interpretar y divulgar como la dedicación sincera y esfuerzo que deben hacer las entidades bancarias y todos los agentes del sector financiero, reguladores y supervisores incluidos, para aplicar e implantar de forma certera y homogénea la regulación que nos estamos dando los europeos en la conformación de la unión bancaria y la unión de mercados, que viene a sustentar de forma primordial la reconstrucción de la confianza y la reputación de este sector económico de Europa en el mundo.
En esta dedicación y esfuerzo, el estudio, conocimiento y divulgación de las normas regulatorias es una tarea base y pilar en su implantación y desde este observatorio de las políticas públicas de la unión bancaria europea nos proponemos incorporar nuestro granito de arena en la larga tarea, entrada a entrada cada semana.
Jorge nos brinda no sólo una de sus recetas, sino también la totalidad de su libro de la gestión de la reputación corporativa, compendio de sus años de dedicación a la materia y que recomiendo :